15 mar 2006

René E. Rodas

El libro de la penumbra
Poesía por entregas (9/9)
y
y
18. Canto desde la penumbra

¿Hace frío en el mundo, Amnios? ¿Cuántos días, cuántas horas sentiré la plenitud reposar en mi pecho?

¿Es muy largo el camino del mundo, Amnios? ¿Sentirán alguna vez mis pasos la reconfortante compañía de una mano amada?

¿Corrompe el espíritu estar vivo, Amnios? ¿A que refugio llevaré la armonía para ampararla de los guadañazos del tiempo?

¿Existe el frágil templo de un puñado de ceniza al cual ofrendar el permanente y doloroso asombro de mis ojos?

¿Seré un extraño a la tierra? ¿Viviré en el desconsuelo de no encontrar casa en mi casa?

Ya siento el rechazo de tu fuerza, Amnios. De nada serviría decirte que mi momento aún no es llegado.

Ahora saldré de ti como un astro eyectado en la turbia explosión del espacio. Cuánta perturbación a la paz.

Ah, el pavor, el asco, la incontinencia escatológica del instinto, el ruido de tus entrañas abriéndose al dolor.

Mi carne asustada repara en sus recursos. Me asiste el poder de detenerlo todo. ¿Qué dices, vida, nacemos o no nacemos?



Angela Iraheta:
éste es para vos, madre

In memoriam Lisa Island,
with my deepest love

México, D.F., Toronto, Montreal,
1987 - 1999.